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15 de abril de 2015

Viaje de los sueños por Asia VIII

El Viaje de los sueños por Asia VIII
“El camino hacia indonesia”

Desde donde les escribo es un lugar perdido en la isla de Penang, Malasia.
Estar en este lugar significa muchas cosas, he vuelto a reencontrarme con la naturaleza, con mi interior, con la capacidad de ingenio e inventiva…
Estoy acampando en una playa, sin agua ni electricidad, sin internet…en un valle, cercado por las montañas y el mar…donde solo tienes, el regreso sobre tus pasos, pues la ruta se termina aquí y solo un caminito zigzaguea hacia la montaña.
Estos son días de nuevos planes, nuevas estrategias, nuevas búsquedas, de cambios, de  arreglar todo lo que puedas, pensando en las exigencias del futuro…de dejar cosas de lado, de empezar a hilar muy fino, donde lo esencial vuelve a ser el tanqueo, tener dinero para la gasolina.



Son días donde comenzamos a dejar las comodidades, sumergiéndonos en tiempos salvajes, donde vuelves a ser aquel perro solitario que recorrió América con un escarbadientes…a reencontrarte con tu interior más extremo, donde la aventura es cosa de cada día, y cada día depende de lo que hagas y pienses…adaptando los recursos que encuentras a tu paso para tus necesidades.
He pasado por Singapur sin pena ni gloria, he cruzado Malasia nuevamente para dejar los sellos de importación de CPD en orden, he contactado a Mr Lim para el viaje de la moto en barco hacia Belawan, un contacto que uso mi amigo australiano Harley, luego leyendo me entero que es el mismo que ha usado Charlie Sinewan para llegar a Indonesia…
He cruzado los más grandes puentes por esta zona, siendo lo más importante que he visto.
Kuala Lumpur y Singapur, dos megas ciudades que no me han sorprendido para nada…será que como los arquitectos de mi país viajan por estas zonas y después tratan de implantar lo que ven, en sus propios emprendimientos, me resultaron ciudades con cosas ya vistas…con cosas que ya conozco…con tecnologías similares a otros lugares…
Lo de la pulcritud de Singapur no la vi tanto, será que estaba en Chinatown y el lugar no era de esa excelencia de limpieza que tiene fama este país.
Es que los Chinos, son sucios…terminan de comer cualquier cosa y la tiran donde sea, en la carretera, en el mar, en la calle… no parecen un pueblo de tanta historia, ni tanta cultura…Si estos lugares se ven limpios, no es por ellos, sino por el gran trabajo que hacen otros, limpiando y juntando la basura que generan.
Singapur tiene todo lo que una mega metrópolis necesita, convertida en el centro de los negocios en el sudeste de Asia, hasta las petroleras malayas tienen su staff en este lugar…Con toda la gama de comida internacional, diversiones de todo tipo, paseos, barrios tradicionales…un transporte público a la altura de su tecnología y necesidades…
Una mención especial al subte, te lleva a todos los lugares más interesantes de la ciudad y por un precio bastante económico, rápido, muy bien cuidado.
Aquí puedes hacer safaris nocturnos, o desayunar con orangutanes (vidrio por medio) en un restaurant metido en medio del zoológico, que es uno de los más completos del mundo…claro sale 95 dólares hacerlo…por lo cual decline la invitación, más que en Sumatra tengo la posibilidad de verlos en estado salvaje.
Una ciudad que a los ojos, se ve como una dependencia de China, el gran gigante que, domina a sus vecinos interviniendo en monumentales obras. Su presencia está marcada en gran manera en Camboya, Laos, Tailandia y Malasia en carreteras, puentes, centrales hidroeléctricas y de a poco su gente se va extendiendo por estos países, con negocios pequeños, dominado el trabajo existente…su gente se ha extendido por todo el sudeste de Asia.
He revisado los números y he tomado la decisión de dejar Borneo y Filipinas fuera de la ruta, me apremia la lluvia de los monzones y los costos de traslado con esas enormes islas…tal vez tenga que dejar algo más de lado, veremos en el futuro…ahora son tiempos en que estamos justos, dentro del presupuesto…pero muy ajustados, sin recursos para comodidades y lujos.
Aquí no somos nada, nadie tiene en cuenta que puede venir algún loco en su motocicleta, buscando transporte entre las islas…y muchas de ellas están incomunicadas para tales aventuras, a menos de contar con un vagón de dinero y pagar los cuatrocientos cincuenta kilos, que por volumen cuentan los cargos aéreos…demasiado costoso.
En otro orden, buscando acampar en T.Kumbar he llegado hasta un lugar llamado Gertak Sanggol, donde al costado de la playa, armé la carpa y me preparé para esperar el día de embarque de la moto hacia Belawan.
Un pueblo de pescadores, dividido en dos culturas totalmente diferentes, los viejos chinos y los malayos islamistas.
He logrado interactuar de mayor manera con los malayos…un pueblo segregado por su religión islamita, pero unido y muy solidario.
Aquí todos ayudan al que no tiene trabajo, a jóvenes parejas, a viejos…con comida, canastas de alimentos o dinero.
Siempre buscan ayudar a quien menos tiene o puede. Desgraciadamente es un pueblo pequeño, sin futuro para los jóvenes, que algún día van a tener que emigrar hacia las grandes ciudades en busca de un trabajo digno. En malasia los técnicos experimentados no tienen grandes retribuciones, así que imaginen a los jóvenes.
Todos se han preocupado en enseñarme el idioma o algunas cosas para sobrevivir mejor, nombres de comidas, saludos, números, nombres de las personas, lugares cercanos para ver y recorrer…donde comprar barato, donde comer barato…donde pescar…
“Salamat paguii” (buenos días), “salamat pitan” (buenas tardes), “Salamat malan”(buenas noches), Kopi panas (café caliente),”untok kamu”(para usted),”minun” (Salud), Makan malan (cena), Makan Tennharyy (almuerzo), “terin makase”(gracias)
“Sama-sama” (Bienvenido)…”Hujan” (lluvia)…”beeras” (arroz)…etc
Hasta me han invitado a una fiesta, tipo kermese (aquellas antiguas fiestas que se celebraban en todas las escuelas nuestras) donde la gente en general se divierte en juegos tales como la palmera engrasada, tirar de la cuerda, el baile de la silla, buscar objetos dentro de una fuente de harina, usando solo la boca y soplando, futbol sala, etc…y como broche de oro la presencia de un ministro Malayo…comida gratuita para todos y bebida. Es cierto que en todo, está la presencia de la religión islamita, en la forma de su saludo hasta cuando al caer la tarde, por un parlante se escuchan oraciones y cantos, donde detienen sus tareas hasta que dejan de sonar.
He salido a pescar en los pequeños barquitos locales, sin mucha suerte, la pesca es escasa y de pequeño porte. Buenos camarones y cangrejos medianos…muchos han dejado de salir, viendo las magras performances. Esto es natural, pues usan redes muy pequeñas y cuelan todo el pescado, donde  no se escapa nada mayor de un centímetro de radio….por lo cual matan todo lo que sacan sin llegar a cumplir los ciclos necesarios de crecimiento de los peces…Va a llegar un día en que desaparecerá la pesca por estas zonas.
He descubierto caminos que siguen la ruta a través de las montañas, por lo cual no hemos divertido, haciendo algunos viajes con la “Burra Negra, por entre la selva malaya…con algunos videos y muchas fotografías.
El bosque no tiene muchos animales, salvo una especie de liebre, que vive en madrigueras y las serpientes, que desarrollan un gran tamaño, y son bastante peligrosas, se paran a manera de la cobra, y atacan cuando ven la ocasión.
Como la selva de montaña, tiene generalmente muchas rocas donde esconderse, en este lugar, es peligroso aventurarse en el bosque…
La primera noche me invito con la cena un cazador de liebres, salen por la noche  a la encandilada, con buen suceso. Claro está prohibido cazarlas, pero una liebre cada tanto a los polis, debe de darle carta libre…todos los que entran al bosque, van con botas altas hasta la rodilla.
Es muy común que llego a algún lugar a comprar algo y me invitan a sentarme a su mesa, ofreciendo siempre, kopi (café) o algún jugo frío (con hielo, los jugos no son naturales) o con comida (makan)…lo que más llama la atención es verlos comer con la mano, si utencillos…todas las comidas tienen condimentos rojizos, o amarillentos, por lo cual terminan con los dedos todos manchados. En todos los lugares de comida hay una pileta y jabón a la vista, para lavarse antes y después de cada comida.
Acá es muy común  que un jugo, té o café con leche se sirva caliente, dentro de una bolsa de nylon, llena de hielo, con una pajita y un pequeño lazo sobre una esquina.
Esto permite colgarla de la moto, y con solo agacharte sorbes la bebida sin dejar de manejar…algunos habilidosos la llevan en su mano…es sumamente refrescante, por lo menos hasta que dura la bebida.
Los calores son intensos, todos superiores a cuarenta grados…aun en la noche las temperaturas son elevadas. Lo bueno es que todos los días llueve en algún momento…ya sea de noche o de día, la briza anterior a la lluvia y el rato posterior a ella, son pequeños instantes donde gozas de algo fresco, disfrutándolo infinitamente.
He logrado mantenerme fresco, mojando la ropa que uso, esto te da un respiro ante tanto calor…del mar sopla un aire caliente y el poco aire fresco que sopla desde la parte continental, pasa muy alto, pues las montañas hacen de barrera. El sopor húmedo de tu cuerpo es la característica de los días.
Roy me ha dado permiso en el local donde ceno (mi única comida del día) de usar la electricidad para recargar las baterías, además me siento en una mesa y puedo escribir tranquilo, (el local está cerrado durante el día) pero las chapas calientan enormemente, casi que creo que tiras un huevo sobre ellas y se cocina al toque. Lo bueno de escribir en estas condiciones, es que en cualquier momento ves un espejismo o te imaginas cualquier historia.
En fin, Malasia es el país que mejor me he adaptado, tienen en esencia los mismos sueños y los mismos problemas que cualquier país del mundo. No se ve tanto como en otros lados querer sacar ventaja del turista, tratando de venderle de todo, ofreciendo constantemente cosas hasta el hartazgo. Aquí caminas tranquilo, sin que nadie te rompa las bolas.
El lunes me mudé a George Town, quería estar cerca de donde iba a embarcar la  moto…después de un buen rato, son como treinta kilómetros de transito pesado, llegue a Cakra Enterprise, la compañía encargada de llevar la moto a Indonesia.
Luego de un dialogo bastante corto con Mr Lim, quedé de estar a las diez de la mañana en su oficina con la moto, los papeles y el dinero. Esa noche dormimos en un hostal…qué bueno sentir una cama y con aire acondicionado…todo un lujo de placer.
Por la noche fuimos junto con Sasha, un alemán por unas cervezas y compartimos una buena charla sobre indonesia…hablamos un poco de las cosas que me iba a encontrar, de lugares y de su gente.
Él estaba convencido de que me iba a ir bien en aquellos lugares, que eran acordes a mi aventura. Eso me animo bastante, junto con la cerveza.
A las diez de la mañana, estaba en las oficinas de Lim, con todo lo requerido…tomó el dinero y me dijo que volviera diez y treinta.
Volví diez y treinta cuando bajó me dijo que tenía algunos problemas que volviera a la once y media.
Volví a las once y media…me dijo que el puerto cerraba y no había tiempo para llegar, por lo cual que volviera a la una y cuarto. (Me lo quería comer crudo…me había hecho perder toda la mañana.)…
A la una y cuarto por fin salimos hacia el puerto, cruzamos las motos en un ferry que nos dejó casi a un costado de donde debía embarcar. Luego de un rato en la oficina dejamos todo en regla para el embarque. Dimos una gran vuelta hasta llegar al barco. Allí nos esperaban los changadores para comenzar a bajar la mercadería que traía el barco. Se llamaba Golden Lestari, era un viejo carguero de madera.
“Tres horas y subimos la moto al barco” me dijo Lim…la subí cerca de las nueve y treinta de la noche…un largo plantón me comí en el puerto, desde las dos de la tarde.
Luego de pasar la soga por donde creía conveniente que la grúa tirara, acompañe a la Burra Negra hasta estribor, dejándola en un lugar más o menos protegida.
Luego regresé al ferry, al hotel…cansado como un perro…en la mañana me esperaba un vuelo a Medan.
Es posible y real pasar la moto desde Penang hacia Indonesia, esta es la dirección de contacto:
Cakra Enterprise
Yeap Thean Seng
187, 2nd floor, Lebuh Pantai, 10300 Penang, Malaysia.
Tel: 04-2625879  Fax: 04-2610821 Mobile: 012-4889717
Email: cakrashipping@gmail.com
Desde Indonesia a Penang éste es el contacto:
PT Melda Jaya
Jl.Bangka Timur Nº 49
Belawan, Sumatera, Indonesia
Tel : 77671410  Fax: 6942476
Mr Adnan 0813-70980743 / 061-77906805.
Siempre lo mejor es comunicarse previamente por mail con Lim.
El costo del traslado es 610 ringits en Malasia y 1.300.000 rupias en Indonesia…mas el vuelo para un pasajero que puede estar en el entorno de 65 dólares ida y vuelta.
Se embarca los días Martes de cada semana en Butterworth, puerto de Penang.
Esta información es real y gratuita….jajajajajaja
Bueno cuando ustedes lean esto, yo habré viajado a Medan donde tendré dos días libres hasta la llegada de la Burra Negra, adaptándome al tránsito (dicen que en indonesia se maneja bastante mal) y a su gente. También tendré que diagramar la ruta  de Indonesia nuevamente y planificar la llegada a los objetivos primarios, el orangután de Sumatra (que no es el mismo de Borneo) y el dragón de Komodo en su estado natural.
Que disfruten.
Ernesto Urrestarasu.