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29 de septiembre de 2013

Equilibrium...

                                 Equilibrio…

Equilibrio…de eso se trata todo esto…de encontrar el equilibrio entre la realidad y los sueños.
De cómo pasar desde la realidad, cruda y estresante a deambular dentro de los sueños…encontrar ese punto de equilibrio, es el secreto de la vida.
El equilibrio perfecto, si das con ese punto…la vida vuelve a tener sentido.
Aquí no importa lo que hagas, ni cuanto tengas, con nada de esto vas a contar cuando dejes el mundo, pues te lo reclamaran todo y todo tendrás que dejarlo…inclusive tu tendrás que quedarte en esta tierra de muertos.
Esa es la realidad más tangible, vives en una tierra de muertos, como decía Arthur C. Clark: “Tras cada hombre viviente hay treinta fantasmas, pues esta es la proporción numérica en los muertos superan a los vivos”
Y ante esto solo queda buscar el punto de quiebra (point break) donde rompas con la corriente que te lleva junto a todos, y te permita vivir…
Esta sociedad esta armada bajo leyes ilusorias, estas leyes te llevarán a un terreno que nunca te va a permitir vivir…solo correrás a tapar los baches que van surgiendo…solo pensaras en el nuevo modelo que comprar, la nueva moto que salió, la nueva casa, nuevos electrodomésticos, fantásticamente innecesarios, lleno de nuevas y  falsas ilusiones…que te condenaran irremediablemente a “toda una vida tapando agujeros”…vivirás trabajando para pagar lo que te han vendido para una tener una “mejor” vida…
Solo queda sacudir la melena y ver más allá del horizonte…lo inexorable siempre va a suceder desde el momento que naces, no hay vuelta…solo te queda dar el coletazo que te libere de la red.
Lo único que puedes hacer es escapar (no siempre lo consigues) del resto de la corriente…e instalarte en tus sueños, que a veces cuando te das cuenta, los están transitando al mismo tiempo que la realidad.
Y ese es el punto de equilibrio, cuando das el paso, subes el escalón y sacas la cabeza por sobre todo y vislumbras el horizonte…y vez que otras cabezas asoman como tú…
“Ernesto, vos ya vives en un mundo paralelo…ahora transitas en él y solo te vas a dar con personas que estén en ese mundo…te vas juntando con la gente que está en tu mismo nivel…”
El mundo de la moto me dio la posibilidad de transitar en ese mundo, con gente que ve más allá del horizonte…
Ahora solo trato de encontrar el punto de equilibrio entre la vida que siempre tuve y la vida de mis sueños…ya encontré hace mucho tiempo con quienes estar en ese mundo paralelo…ahora solo salgo y entro de la realidad, cuando puedo, cuando me dejan, pero siempre con la mira puesta en ese momento…en el que puedo transitar en los sueños.
Ahora ya no veo un mapa solamente, veo sus relieves como algo común, ecorrerr por nada puede detener mi mente y cuerpo hacia la meta señalada.ro siempre con la mira puesta en ese momento...rizonte real, transitable y donde sin ningún impedimento, se me permitirá recorrer su geografía, sabiendo que nada puede detener mi mente y cuerpo hacia la meta señalada…
Mis sentidos están más agudos, siento el sonido de la selva, del viento de la montaña…de los rápidos en la montaña, siento olores que me transportan…siento sabores peruanos, mexicanos, vietnamitas, tailandeses, hindúes…siento el frío de las alturas, el calor del desierto…veo la arena, el mar…
Desde que subí a una moto, ya nunca volveré a ser el mismo…nunca más.
Ahora busco solamente el equilibrio, que en permita transcurrir en el sueño…y vivirlo…esa es mi última meta.

Ernesto Urrestarasu.