Después de las despedidas en Collipulli hice una recorrida tomando algunas fotos  de la ciudad  y del puente histórico
La cimarrona tiene buenos brios por la mañana así que nos hicimos al camino rumbo a los Ángeles(170 kmts).
Almorcé unas aluyas con atún en Temuco y seguí viaje sin novedades.
Las aluias como se pronuncia, son panes tipo tortugas de 2 cmts de espesor con masa similar a las galletas dulces .Las aluyas se comen con palmayo (palta y mayonesa), avemayo (pollo y mayonesa), pezmayo (pescado y mayonesa. Otra cosa que aprendí es que a la merienda de la tarde le dicen once .Fuimos pasando ciudades y pueblos hasta llegar a Victoria. Allí fue mi único intento de tratar de sacar el salmón, después de estar cuatro horas intentándolo, junte todo y pusimos proa a Chillan (108 kmts) arribando en la tardecita. Encontrar un camping en las ciudades chilenas es algo imposible. No están contenidos en el formato de cada ciudad, por lo cual vamos a dar a Goman, una colectividad de 80 personas que por ser uruguayo me dejaron instalar la carpa en la cancha de futbol, Como tiene solo una calle todos pasaban y charlaban conmigo de manera afable, hasta que me metí en la carpa. Me desperté con el amanecer con renovadas energías dispuesto ese mismo día llegar a Santiago. Una señora con dos botellas de leche recién ordeñada pasa:
  • Durmió bien vecino – me dice con una sonrisa
  • Espectacular – le digo
  • Agradezca a todos los demás las atenciones- repito
  • Vio que es tranquilito, salvo los zancudos(mosquitos)
  • Que tenga buen viaje- y se aleja
Guardo todo a nos hacemos a la ruta, fue un día donde caminamos, pasando por Talca, Curico y Rancagua desembocando en Santiago con algunos ruidos en la moto, nos comimos como390 Kmts de una sentada.
El representante de Motul estaba cerrado por ser sábado de tarde y tendría que esperar hasta el lunes para un Service general.
Aquí comienza el estrés del alojamiento, ningún Couch de Santiago había contestado. Hacemos casi 60 kmts mas buscando un camping pero terminamos como al principio dentro de la zona del centro a pocas cuadras de donde debería estar el lunes. Otro dilema encontrar un hostal con seguridad para la moto. Al fin halle uno y me rendí. Fue positivo, me bañe cinco veces en 36 horas y La Cimarrona descansó un día y medio.
Me dormí todo y Salí  a sacar algunas fotos del pulcro Santiago, el metro estaba cerrado pero que la limpieza en el es inmaculada.
Todas las plazas de chile son con grandes arboledas, donde es un placer estar en los medios Díaz de calor intenso.
El lunes estábamos en primera línea en el local Yamaha de Mario Quesada representante Motul para Chile quien realizó el service a pedido de Motul Uruguay en la persona de Washington             Quien junto a Williams Lemes de Willy Motos son los que han auspiciado este emprendimiento desde Uruguay. Para ambos el agradecimiento incondicional.
También agradecer a Álvaro, Walter, Humberto, Horacio y Pablo que son el soport the dreams trip in Uruguay.
Cambio de bujía y aceite y una cadena nueva de repuesto igual a la existente y no pudimos dar con algún problema mas.
Al mediodía estábamos en ruta rumbo a Viña del Mar (120 Kmts) donde nos esperaba Freddy para alojarnos. Bajar hacia la ciudad por entre los cerros y ver el mar espectacular que me esperaba fue magnifico, Hacia quince días que no veía el mar, ahora estaba como en casa
En la estadía en Viña del Mar compartí largas charlas sobre chilenismos y cosas de vida. Me fui dejando nuevos amigos y puse rumbo a la Serena (420 Kmts) pegado a Coquimbo llegando entrada la noche.
Ni un lugar donde tirarme, por fin di con un hostal barato y caímos muertos.
La cimarrona en un garaje y yo en una cama de dos plazas.
Conseguí agua caliente y aluyas y desayuné junto a un café negro antes de partir con rumbo a Copiapó (340 kmts) En un descanso en el desierto en el kmt 690 conozco a Juan de Dios Opazo, en medio de la nada y bajo el único árbol en kilómetros a la redonda. Nos guarecemos con la moto bajo su sombra y charlamos largo rato con Juan. Tiene un carro donde vende de todo, hasta helado de palito. En le pasado había tenido un socio que lo embromó y se quedo por vida ahí. Comentamos del cercano observatorio La silla y de su lente de 3.5 m de diámetro donde se veía todo el firmamento. Juan lo conocía porque había hecho amistad durante algunos meses con una yanqui que vino a hacer estudios  en La silla. Un hombre simple, de gran cultura, que no quiere nada del gobierno. La lucha todos los días bajo el único árbol de Vallenar a Copiapó.
Llegue a Copiapó y seguí  70 kmts mas para Caldera. Estaba todo ocupado, ni hoteles ni camping, ni cambios, ni tarjeta. Después de dar varias vueltas sin resultado voy para la estación de servicio en la carretera. A la entrada me quedo sin transmisión. Llego empujando y armo la carpa atrás de la estación. Estaba cansado, con la cimarrona rota y con dos pesos en el bolsillo. Agua caliente, café y pan amasado casero de cinco días fueron mi cena. No estaba preocupado por la moto, mañana seria otro día.
El ruido de los motores de los camiones me despertó temprano. Junto la carpa pensando como solucionar la rotura. Para colmo estaba pinchada la rueda. Arrastro la moto hasta la gomería y me pongo a desarmar. Saco la y veo que los tornillos del plato se habían roto. Mientras lo hacia se acerca un camionero y me pregunta si estaba en pana?
El también estaba en pana (con rotura del camión quedando varado) Le explico que tengo que conseguir en Copiapó los tornillos y se va.
Le digo cuanto me sale la pinchadura al gomero y le digo que la arregle mientras voy a Copiapó a conseguir las refacciones.
En eso se acerca el camionero y me dice:
  • si logro arreglar lo mío , yo te llevo a Copiapó –
  • ¿desayunaste?
  • No.
  • Bueno vamos a desayunar y vamos a arreglar el sello que pierde en el camión.
  • Ok, vamos.
  • Cuando pedimos el café con leche y aluyas pregunta a la empleada si tiene ají rojo bastante.-
  • Algo le dice ella –
  • Bueno dame todo lo que puedas que la próxima ves que pase te regalo dos bolsas-
    Nos fuimos con una bolsita de ají rojo en polvo
    Lo ayudo a meter el ají  en el radiador, prende el motor y examinamos como deja de perder agua.
    Me subo y nos vamos hacia Copiapó.
    Humberto Alejandro es el único varón nacido entre doce mujeres. Entre la charla donde nos ponemos al día sobre nuestras vidas, los 70 Kmts se hicieron rápido.
    Encontré los tornillos en Casas Biman, una bicicleteria que vende artículos de motos. Mario Núñez fue muy amable conmigo instalando los tornillos y sellándolos. Eran las tres cuando logre volver a Caldera.
    Me pongo a armar todo y lo coloco, pruebo y sale todo bien.
    Encinto algunas rajaduras de los plásticos que con la nafta se rajan y salimos al camino llegando a Chañaral a 400 Kmts de Antofagasta.
    Conseguiré las aluyas, un tarro de café y seguiré hacia Antofagasta.
    Se que no voy a llegar, pero en la noche voy a recuperar el terreno perdido, hasta donde llegue.
    He reflexionado mucho de mis errores en estos días, ahora estoy en el baile y tengo que bailar. En estos momentos es cuando pienso en casa, en la familia y en los amigos. Entonces salgo a la carretera pues siento su energía detrás de mi, acompañándome y alentando.
    Si cruzo el desierto de noche no gasto cubiertas y la moto sufre menos.
    Un abraso a todos
    Ernesto Urrestarasu
    Camino a Perú
 Marcial en Collipulli...un grande,que venció el cáncer con mil litros de Santa Maria


                                     Collipulli bridge

                                     Valle de los ríos 


                                      Cruzando la montaña... 


                                     Centro de Santiago





                                      Viña del mar y sus carruajes